BAJ’UNA ENCINA
PATRICIA PÉREZ VÁZQUEZ, SALVATIERRA DE LOS BARROS, 1992
El trabajo que desarrollo es multidisciplinar.
He publicado un fotolibro y presentado algunas instalaciones artísticas, performances
y fotografías. Actualmente estoy muy centrada en la ilustración; aquí me siento muy cómoda. Son ilustraciones coloridas, alegres y nostálgicas.
A través de ellas narro historias que cada espectador puede crear, imaginarse, recordar; relatos que tienen que ver con de dónde vengo y quién soy.
Me inspiro en las casas, en el campo, en espacios vividos, en la alfarería salvaterrense (para mí el «concepto» quizás más importante porque aúna todo lo anterior), en la naturaleza y fauna… pero siempre elementos de mi casa, EXTREMADURA.
En definitiva, me interesa experimentar con lo «extremeño» y mantener vivo un lenguaje, el mío.
Baj’una encina
Representa el mes de septiembre extremeño. Trato de construir una narración identitaria, donde cada elemento simboliza algo: una fiesta (como la virgen de la Coronada), el día del jamón o de Extremadura, un antepasado (como la figura del alfarero y las estrellas del cielo), una tradición, la vendimia y la Plaza
Alta de Badajoz como representación de la Almossassa. También he incorporado elementos que siempre aparecen en mis ilustraciones como vasijas de barro, cigüeñas, montañas, bellotas… como símbolos extremeños.
El caos nos proporciona mil historias posibles, los colores brillan y el sentir de una tierra nos hace recordar quiénes somos.